Cuando no tengas nada más que preguntar… Sigue preguntando.

Cuando se alejó de la multitud y entró en casa, le preguntaron sus discípulos sobre la parábola. Marcos 7:17 Cuando nuestros bebes comienzan a hablar nos parece súper emocionante y vamos por ahí diciendo a todo el que se nos cruza en el camino las palabras que ya son capaces de repetir; la emoción se hace mayor cuando dicen palabras por su cuenta y cuando empiezan las preguntas ¿Qué es eso? ¿Para qué es eso? ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué? (así de repetidas veces o más) Ya ni queremos responderles, hasta que caemos en cuenta que es una etapa más de nuestros chiquitos. Al conocer al Señor parecemos bebes, repetimos lo que escuchamos de nuestros pastores y lideres, dejamos incluso que las oraciones las digan otros por nosotros, Vamos aprendiendo y empezamos a meditar de lo que leemos y escuchamos y ya vamos teniendo la capacidad de comunicarles a otros lo que estamos conociendo. Los discípulos de Jesús caminaban junto a Él y escuchaban las parábolas que ...