Nehemías 1:7, La confesión

...Reconozco que todos hemos pecado contra ti. V.6
He pecado yo, y también mis antepasados . Hemos actuado muy mal y no hemos obedecido los mandamientos que nos diste por medio de Moisés. Nehemías 1:6‭-‬7

Cómo un juego de niños, voy a recapitular:
Ya Nehemías,
- Conoce su identidad en el Señor,
- Tomó su tiempo para meditar en lo mal que estaba su pueblo
- Ora a Dios, reconociendo su majestad e intercede por su pueblo.

*Hoy Nehemías se confiesa ante Dios.*

Comienza diciendo: *Reconozco*, no dice *reconocemos* ...
Escuché en una prédica estos días, que *cualquier condición, característica o cualidad que debe tener una iglesia, necesariamente debe identificarme a mi como individuo*

Es decir, si leyera los mensajes del Apocalipsis 2 y 3, entonces todas esas represiones y promesas, las debo aplicar a mi persona.

*Nuestros padres pecaron, ya no existen, y nosotros cargamos con sus iniquidades. Lamentaciones 5:7*

Las Escrituras hacen mención a los pecados de los padres y abuelos, yo decía: No es justo que yo pague por lo que mi abuela hacía, si ella no conoció a Cristo ¿que será de mi?.

Hay una realidad de la que no estamos salvos, humanamente hablando, y es que nosotros repetimos patrones de nuestros padres, aun sean buenos o malos.  Es a medida que crecemos y maduramos que vamos desechando lo que no nos conviene, o lo que no queremos, aunque nos convenga. Eso nos hace parte de una familia.

Entonces, no se trata de que paguemos por pecados ajenos (y los no tan ajenos), sino de aceptar que no vine al muno sola; nací de una madre y un padre, que a su vez, nacieron de sus padres y asi... debo saber porque mis hijas tienen ese lunar detrás de la oreja como yo.

Efesios 2:3 nos explica mejor el porque vivíamos en la carne...*satisfaciendo los deseos de la carne y de la mente, y éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás.*

Pero Nehemías ya había dicho en el verso anterior, *yo soy tu servidor de día y de noche*... y de paso es tan noble, que ha orado por su pueblo también (Nehemías 1:6)

Si bien la salvación, buscar la presencia de Dios, conocer su voluntad y hasta descansar en Dios, es individual.  No debo de olvidar "mi sentido de pertenencia* a una familia o comunidad donde Dios me ha puesto.

Y aunque parezca sin sentido, para mi, cuando ha sido necesario, confesarme con Dios por las faltas de mis padres, me libera de repetirlas, porque ya las identifiqué, así le puedo pedir con claridad, que no quiero repetir y donde deben ser construidas mis murallas (mis fortalezas).

¿Y si le ponemos un comodín?

Este tipo de confesión por desobedecer a Dios, acompañado de oración a Él, me irá encaminando a que mis hijas tengan un poco menos de carga psicológica, porque pecadoras ya nacieron, y siempre necesitarán la Gracia, misericordia y salvacion de nuestro Señor Jesucristo.

#meditandounpoco