Nehemías 2:11-12, 16 , Más tiempo y silencio
*Y llegué a Jerusalén y estuve allí tres días.
Nehemías 2:11*
Nehemías llegó a Jerusalén, lleno de pasión, lleno de oración, lleno de fe, lleno de sabiduría, lleno de una gran visión, lleno del apoyo del rey, y finalmente llega a su destino y ¿no hizo nada por tres días?
Con este perfil de *"llamado encaminado por Dios"*, es probable que yo hubiera llegado a Jerusalén, super emocionada de contarle a todos lo que vine hacer, sobre todo en el nombre de Dios...
Definitivamente Nehemías aprendió a esperar el tiempo de Dios para ejecutar acciones, pues estas acciones son un tarea especial de Dios, no un proyecto personal...
*Y me levanté de noche, yo y unos pocos hombres conmigo, pero no informé a nadie lo que mi Dios había puesto en mi corazón que hiciera por Jerusalén... Nehemías 2:12*
El pasaje de Proverbios 4:23 dice: *sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón* ; porque de él mana la vida.
Es bueno tener amigos Cristianos, pero es peligroso llevar el corazón en la manga. "Tenga un lugar secreto del cual nadie sepa sino solo usted y Dios.” (Redpath)."
*Los oficiales no sabían adónde yo había ido ni qué había hecho, ni tampoco se lo había hecho saber todavía a los judíos, ni a los sacerdotes, ni a los nobles, ni a los oficiales, ni a los demás que hacían la obra. Nehemías 2:16*
“A menudo usted encontrará mejor no comentar su plan con otros. Si usted quiere servir a Dios, vaya y hágalo, y luego deje que otras personas se enteren después. Usted no tiene necesidad de decir lo que va a hacer, y, si puedo agregar, no hay necesidad de que usted siga contando lo que ha hecho, porque con mucha, mucha frecuencia Dios se retira cuando nos jactamos de lo que se está haciendo.” (Spurgeon).
Es obvio que cuando Nehemías salio del palacio del Rey en Susa (1:1) y cuando llegó a Jerusalén (2:11), alguien debió notar su ausencia y su presencia, respectivamente, pero no dijo nada hasta que llegó el momento correcto (*para Dios*).
Muchas veces no contar algunos planes, no es por que te los puedan boicotear, como los casos de Sambalat y sus amigos; también tratar de contarlos o explicarlos, pueden crear confusión a los demás (y a ti mismo).
El tiempo de Dios para esperar, buscar respuestas, encontrarlas y ejecutarlas, es perfecto, aunque no entendamos el cuadro completo de lo que estamos llamados a hacer... hay un *dónde, cuando y como* falta el *por qué y para qué*...
#meditandounpoco
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