Gracias a Dios por mi tornillo menos...

En mi corazón atesoro tus dichos para no pecar contra ti.
Salmos 119:11

La Biblia, la Palabra de Dios, es un Excelente manual de vida, es nuestro libro de instrucciones.  Tiene todos los pasos para que física y espiritualmente estemos bien armados.

Aunque lo que acostumbramos a hacer es armar las cosas que compramos sin el manual, sin importar que al final nos sobre un tornillo, el que justificamos que debieron ponerlo ahí de repuesto,  por si se nos perdía otro.

Por si acaso, ¿Usted tiene otro par de manos o algun organo interno extra guardado en su casa, que haya venido cuando nació disque por si se le dañaban en el camino? Si es así, dígale a los que esperan donación, donde vino esa cajita.

El salmista exalta en todo este pasaje, la importancia de las leyes de Dios, habla de la rectitud y que claramente, son la única opción para vivir una vida agradable a Dios.

Pero hay versos, donde el pide ayuda a Dios para poder obedecer sus estatutos, clama por la salvación conforme a las promesas de Dios (v.41)

Al final, el salmista se declara "pecador" y pide ser rescatado, porque no pudo hacer todo lo que su corazón atesoraba, la palabra de Dios.

Las instrucciones de Ikea no te dicen, guarde esta pieza "por si acaso", traen exactamente todo lo que debes usar.

No existe otro manual de vida que nos enseñe como debemos usar nuestro cuerpo y nuestro ser; y todas las piezas encajan a la perfección y nuestro manual  no dice "por si falla" sino que incluye la clausula "SEGURO FALLARÁ" y por eso viene Jesús al rescate para poner las piezas en su lugar correcto con su redención.

Nunca te olvides que quien te creo, sabe exactamente como funcionas y sus promesas no cambian, aunque nos falte un tornillo :-).

Cual oveja perdida me he extraviado; ven en busca de tu siervo, porque no he olvidado tus mandamientos.
Salmos 119:176

#meditandounpoco

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